¿Qué es la motivación?
Motivación proviene del latín motivus (movimiento) y -ción (acción o afecto), lo que significaría causa de una acción. La motivación refleja el deseo de una persona de satisfacer sus propias necesidades. La Real Academia de la Lengua define la motivación como el “conjunto de factores internos o externos que determinan las acciones de una persona”.
Tipos de motivación
Repasando las teorías clásicas, y sin ánimo de exponerlas en profundidad, sino simplemente a modo de mención, debemos tener en cuenta las siguientes teorías de la motivación más destacadas en la literatura:
- La teoría de la jerarquía de necesidades (Maslow, 1954) presenta las necesidades de las personas como metas a ir consiguiendo de forma progresiva, pudiendo avanzar a las más elevadas jerárquicamente siempre que se cumplan las inferiores.
- La teoría de McClelland (McClelland, 1989) habla de tres tipos de motivación: de logro (sobresalir y tener éxito), de poder (influir y controlar a las personas) y de afiliación (los valores que tienen que ver con las relaciones interpersonales que establecemos).
- La teoría del factor dual (Herzberg, Mausner y Snyderman, 1967) divide los factores que nos motivan en factores higiénicos (mantienen al individuo alejado de la insatisfacción) y motivadores (aumentan la satisfacción del individuo).
- La teoría de las expectativas (Vroom, 1964; Potter y Lawler, 1968) afirma que las personas, según sus creencias y experiencias, generan expectativas de las circunstancias y mantienen el objetivo de aumentar recompensas y disminuir castigos.
- La teoría ERC (Alderfer, 1972), considera tres tipos de motivación, como serían la existencial (necesidades fisiológicas y de seguridad), la de relación (sociales, de apoyo, pertinencia y reconocimiento) y la de crecimiento (evolutivo y personal).
- La teoría de fijación de metas (Locker, 1969) plantea que una meta es aquello que una persona se esfuerza por lograr, centrándonos en la acción y la atención.
Una vez que conocemos las principales teorías de la motivación, es el momento de mencionar los tipos de motivación que existen:
- Motivación intrínseca (satisfacer las propias necesidades e intereses)
- Motivación extrínseca (alcanzar otras finalidades externas)
- Motivación positiva (búsqueda de una recompensa positiva)
- Motivación negativa (evitación de un estímulo negativo)
- Motivación personal (dirigida a satisfacer una necesidad propia del individuo)
- Motivación secundaria (lograr bienestar a través de los demás)
¿Cómo fomentar la motivación?
Fija metas a corto, medio y largo plazo
Establecer metas sirve para proporcionar enfoque y reforzar el compromiso. Es importante fijar metas a corto, medio y largo plazo para así ir alcanzando los objetivos poco a poco sin marcar una única meta final que nos pueda desmotivar durante el proceso.
Utiliza recompensas
Ten en cuenta lo que te gusta y te hace feliz y si no lo tienes claro haz una lista de las cosas que te gustan. Esta lista te ayudará a fijar recompensas cada vez que realices alguna meta planteada. De esta forma tendrás otro aliciente para conseguir tus objetivos y realizarlos resultará más fácil.
Registra tus progresos
Muchas veces, empezamos muy motivados a lograr los objetivos, pero conforme pasa el tiempo, esa motivación poco a poco va decayendo y desvaneciéndose si no la trabajamos. Por ello es fundamental tener en cuenta los progresos que vamos alcanzando para seguir reforzándonos.
Visualiza tu éxito
Utiliza la visualización para imaginarte a ti mismo logrando esa meta que te has propuesto, intenta sentir lo que sentirías, pensar lo que pensarías, etc. Piensa los beneficios de hacer lo que te has propuesto, es decir, todo lo bueno que te traerá hacerlo.
Recuerda tu historial de motivación y confía en ti
Todas las personas hemos estado motivadas alguna vez, piensa en aquellos casos en los que tuviste una gran motivación para poder actuar de la misma manera. Eso te ayudará a seguir motivándote.
Pensamiento positivo
La motivación también depende de tus pensamientos. A partir de las expectativas que tengas, podrás ir avanzando, y si piensas que lo puedes lograr o no, aumentará o disminuirá tu motivación. ¡Ten en cuenta que eres una persona válida y que puedes hacer todo lo que te propongas!
Entender que los errores son humanos
Si alguna vez fracasamos, tenemos que tener en cuenta que es normal. Los humanos cometemos errores y no debemos estancarnos en ellos. Debemos reponernos, aprender de ellos e intentar no cometerlos la próxima vez.
Si quieres trabajar tu motivación y profundizar sobre ello no dudes en contactar con nosotros y te ayudaremos a encontrar el psicólogo adecuado para tu caso concreto.