El Síndrome de Estrés Crónico y Múltiple, también conocido como Síndrome de Ulises, se refiere a
un cuadro psicológico que sufren las personas que migran a otros países, normalmente pasando por
situaciones extremas. Este término fue acuñado por el psiquiatra Joseba Achotegui en 2004, siendo el
fundador del Servicio de Atención Psicopatológica y Psicosocial a Inmigrantes y Refugiados (SAPPIR)
España, sumándose a otros destinos, es uno de los países que recibe miles de inmigrantes al año.
Migrar es una tarea complicada que implica dejar atrás el lugar de origen, separarse de seres queridos y
adaptarse a nuevas culturas y estilos de vida. Esto proceso puede resultar tan intenso que en ocasiones
supera la capacidad de adaptación de las personas y provoca unos niveles de estrés excesivos.
¿De dónde proviene el término?
Todos conocemos a Ulises, uno de los personajes más famosos de la mitología griega. La Odisea narra
sus aventuras, en las cuales, durante años, se enfrenta a miles de peligros y adversidades lejos de sus
seres queridos.
“Ulises pasábase los días sentado en las rocas, a la orilla del mar, consumiéndose a fuerza de llanto,
suspiros y penas, fijando sus ojos en el mar estéril, llorando incansablemente…” (Odisea, canto V,
150).
¿Cuándo migrar se vuelve un problema?
Según el Dr. Joseba Achotegui (2009) hay que dejar claro que la migración no es una causa de un
trastorno psicológico, sino un factor de riesgo si se dan las siguientes circunstancias:
- Si existe vulnerabilidad: la persona no se encuentra en buen estado de salud o tiene algún tipo de discapacidad.
- Ante un nivel de estresores muy alto
- Cuando se dan ambas condiciones.
Además, se precisa la existencia de cuatro elementos desencadenantes de este síndrome:
1. Soledad o separación de los seres queridos
2. Duelo por el fracaso del proyecto migratorio
3. Lucha por la supervivencia
4. Miedo a los peligros que puedan surgir durante el viaje
De esta manera, los síntomas más frecuentes del Síndrome de Ulises son:
- Sintomatología de tipo depresivo: Llanto, tristeza, culpa, baja autoestima, ideas de muerte y
suicidio (menos frecuentes), incapacidad para experimentar placer, pérdida de interés sexual y
descenso o aumento del apetito. - Síntomas del área de la ansiedad: Tensión y nerviosismo, preocupaciones excesivas y
recurrentes (p.ej. vivienda, trabajo, alimentación, situación legal), irritabilidad e insomnio. - Sintomatología somática: Cefaleas y fatiga, otros síntomas como gastritis, úlceras, alteraciones
del sueño entre otras. - Síntomas del área confusional: Défictis de memoria, desorientación espaciotemporal, estados
de confusión.
Recomendaciones:
El síndrome de Ulises es un cuadro de estrés crónico ante un proceso migratorio en situaciones
extremas, dificultosas o traumáticas. En un alto porcentaje de casos, se desvaloriza el sufrimiento de las
personas y se ve incorrectamente diagnosticado.
Por ello es importante que la persona que sufre este tipo de síntomas busque ayuda profesional
(psicólogos, ONG, Servicios Sociales, Asociaciones, etc.).